La jornada empezó como siempre. Potente desayuno, últimos retoques a la planificación. Y a caminar. No hacía mucho frío. Claro preámbulo de lo que se nos venía encima. Teníamos una potente etapa por delante. Burgos – Castrojeriz (34 Km).
- Oye, que parece que va a llover.
- Será poca cosa.
Despues de unas fotillos en Hornillos del Camino, el chirimiri, mollaparvos o como sea que le llamen por estos lares, nos complicó la tarea. Las cámaras de fotos y la lluvia no se llevan demasiado bien.
A las doce ya no pudimos seguir con la andaina. De vuelta para Burgos. El resto de la jornada la dedicamos a preparar las próximas etapas que nos esperan.
A úlltima hora de la tarde quiso dejar de llover. Nos decidimos a dar una vuelta por el centro de Burgos. Bonito, muy bonito.
Después de este pequeño revés meteorológico, mañana retomaremos nuestra andaina.
Bueno, no está mal estar un día por Burgos... Es una maravilla. Cuidado con la morcilla, que después de tomarla no se anda muy bien...
ResponderEliminarSaludos,